Portada  |  27 junio 2019

Se estima que en Argentina hay unas 10.000 personas con sordoceguera

La Institución Fátima es el único centro de la ciudad y la provincia de Buenos Aires especializado en chicos que -en los casos más extremos- no pueden ver, oír, ni hablar.

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Fátima, hija de Alicia y Carlos Picasso Cazón, nació con sordoceguera, que combina la discapacidad de la vista y el oído.

Luego de participar en distintos centros de rehabilitación en el país los padres de Fátima se dieron cuenta que ninguna respondía a las necesidades de su hija. Probaron en el exterior, pero la separación de su familia fue negativa para Fátima, por lo que decidieron regresarla a la Argentina y crear un centro para ella y todos los chicos y adultos con la misma problemática.

La institución, que lleva su nombre y que cumplió más de 30 años, inauguró el año pasado un Centro de Día para los jóvenes y adultos con sordoceguera y/o discapacidad múltiple de base sensorial en Béccar.

En el Día Internacional de las Personas Sordociegas, Telefe Noticias se hace eco de algunas precisiones para conocer y entender a las personas que padecen sordoceguera, fomentar la igualdad de condiciones y evitar todo acto de discriminación.

Estas son las actividades que ayudan y distinguen a las personas sordociegas. Enteráte de qué manera podés colaborar con ellas:

  • Para desplazarse. Las personas sordociegas usan un bastón de dos colores, rojo y blanco, para distinguirse de las personas que solo tienen discapacidad visual.
  • Para comunicar. Hay diversas formas para comunicarse con las personas sordociegas. La más usada es la que usa el alfabeto manual o dactilológico, en la que se realizan símbolos en la palma de la mano de la persona sordociega. Hoy día también existen aplicaciones tecnológicas que ayudan a comunicarnos.
  • Para ayudar. Puedes dirigirse a las asociaciones de personas con sordoceguera, ya que realizan cursos y talleres de formación para voluntarios.
  • Para saludar. Para saludar a una persona sordociega es importante que nos coloquemos cerca de ella. Allí se le puede avisar de nuestra presencia tocándole con suavidad el hombro o el brazo. Luego le decimos nuestro nombre. Si tiene resto auditivo se le puede hablar de forma clara y directa, evitando los sitios con mucho ruido. Siempre preguntaremos qué forma de comunicar prefiere. Despídete siempre.
  • Para guiar. La forma más adecuada es dejarle que se tome de nuestro brazo. Le iremos avisando si hay escaleras, cruce de calles, puertas, u otros obstáculos.

No se sabe cuántos sordociegos hay en el país, pese a que el año pasado se lanzó un censo para actualizar el del 2002. "No hay datos estadísticos de la población, lo que demuestra lo poco visibilizada que está la sordoceguera en nuestra sociedad", sostenía en 2017 Graciela Ferioli, representante para América Latina de Perkins Internacional, una organización que trabaja con la discapacidad múltiple. En Estados Unidos la tienen 40 mil adultos y 10 mil niños y jóvenes, un 0,015% de la población, y según estimaciones en Argentina se podría pensar en una cantidad aproximada de 10.000 personas con sordoceguera.

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