Ya te mostramos cómo se manejó el geriátrico Incas. Los enormes descuidos derivaron en la muerte de 9 personas y en el contagio de 38. Te revelamos audios fundamentales dentro de la causa, y pruebas que reflejan la crítica situación dentro del Apart, el geriátrico de la muerte.
Esta es la segunda parte, con más pruebas que exponen el intento de ocultar las negligencias ocurridas en la avenida Los Incas.
Hay dos mails fundamentales, ambos enviados el mismo día, el domingo 19: uno a las 2.11am y otro a las 12.26 pm. En el primero, el geriátrico comunicó la emergencia a los familiares de los residentes, pero en esa instancia los directivos omitieron contar que Luisa, la cocinera presionada para ir a trabajar, ya era tenía coronavirus positivo. A las 2.11 de la madrugada del domingo 19, por pedido de los dueños, Anabella -la encargada de administración- envió ese primer mail a los familiares contando que había un paciente confirmado, pero omitiendo el caso de Luisa.
El segundo mail es otra muestra de la escasez de cuidados y prevención. Fue enviado el mismo domingo a las 12.26 del mediodía, diciendo “lamentamos informar que pese a haber cumplido con todo lo que estaba a nuestro alcance, tuvimos casos sospechosos de Covid 19 en la institución (…) y hasta el momento uno de ellos dio positivo para el virus”. En realidad, teniendo en cuenta los descuidos ocurridos, se dejó propagar el virus. Varias de las empleadas con síntomas-presionadas por los directivos para concurrir al trabajo- debieron casi escapar del geriátrico para ir por su propia cuenta a las guardias.
Ese mail termina de una forma muy particular. Pidiendo a los familiares que, de manera urgente, se lleven a los residentes a sus casas, sin tener confirmaciones exactas de los contagios: “solicitamos por fuerza mayor el urgente traslado preventivo de todos los pacientes a su domicilio familiar con el único fin de cuidar su salud”.
Los familiares de las victimas recibieron los dos mails, uno tras otro. Y ese domingo lo recuerdan como trágico, como un balde de agua fría. “Me di cuenta que mi mama era un negocio, y lamentablemente ese negocio se me la llevó“, dijo Cristina, hija de Lidia Gerbec, una de las victimas mortales.
Y siguen las pruebas. Telefe noticias hablo con Marcela, una de las empleadas que trabajó con síntomas y se internó por su cuenta. Marcela dio un valiente testimonio, revela que el sábado 11 de abril le comunicaron a la doctora Raffo que había personas con fiebre dentro del establecimiento. Según cuenta, la doctora pidió que no llamen a emergencias, que no se preocupen. Ella se empezó a sentir mal el 12 de abril, con dolores de garganta y de cuerpo. Afirma que los dueños intentaron que ella vuelva a trabajar, sabiendo que se sentía mal.
Luego del “rescate” del SAME el 21 de abril, el mericoles 22 la justicia realiza el allanamiento en el geriátrico. Se recolectaron computadoras, videos e historias clínicas. Hoy se llamó a indagatoria a los acusados, pero no se pidió la detención de ninguno. Es más, el geriátrico abre sus puertas para que algunas empleadas entren a limpiar, con intenciones de abrirlo nuevamente. Te mostramos imágenes claras del personal entrando, una de ellas incluso con productos de limpieza en sus manos.
Telefe noticias habló con Luis Megyes, quien dice que confía plenamente en su equipo y no cabe un arrepentimiento dentro de su acción. Considera que actuó dentro de los parámetros correctos y hasta que no se le mostró los audios, creyó “Imposible” su existencia.
La justicia deberá seguir su curso de investigación, indagar sobre esta realidad convertida en pesadilla. Una realidad marcada por descuidos e impericias que dieron la bienvenida a la pandemia. A la muerte.
En memoria de los fallecidos.
González Angelica (24/4/20)
Gerbec Lidia (8/5/20)
Verón Dora (7/5/20)
Sujovolsky Ester ZL (28/4/20)
Flammini Alberto (14/5/20)
Carlos Frias (1/5/20)
Capra Lilia (29/4/20)
Olivero Héctor (28/4/20)
Lichsztain Isabel ZL (29/4/20)
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