Un argentino de 21 años que era buscado desde hacía dos meses por la policía española fue detenido en la localidad de Benalmádena, en Málaga, acusado de haber cometido al menos 12 robos.
El sospechoso habría robado distintos comercios con un modus operandi muy particular: usaba las tapas de las alcantarillas para romper los vidrios de las puertas de los negocios y así robar las cajas registradoras.
Los robos fueron de madrugada y tres de ellos en una misma noche, en distintos hoteles de Benalmádena.
El argentino fue detenido con un cómplice, ya que la Policía cree que no perpetuó los ataques solo. Se trata de un hombre de 26 años y nacionalidad marroquí que estaba con el sospechoso.
Los asaltos fueron cometidos a bares, restaurantes, perfumerías e inmobiliarias.
Foto: DPA
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