Una modelo británica murió tras intentar conseguir una selfie el domingo en la reserva Diamond Bay en la ciudad australiana de Sydney.
Madalyn Davis, de 27 años, se encontraba de viaje en ese país oceánico y la noche anterior había estado en una fiesta.
En dicha actividad decidió ir a la reserva junto a otros siete amigos para sacarse una selfie en un acantilado de casi 30 metros de altura, lugar que es frecuentemente visitado por personas justamente para tomarse una fotografía en el sitio.
Se cree que Davis traspasó una valla de seguridad para sentarse en el borde del lugar, donde habría perdido el equilibrio, cayendo al mar. El cuerpo de la mujer fue encontrado luego de cuatro horas de búsqueda.
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