La pandemia de coronavirus avanza a gran paso por todo el mundo y por este motivo casi todos los países han adoptado medidas para intentar prevenir el contagio del virus respiratorio que ya causó la muerte de más de 20.000 personas.
El cierre de fábricas, las autopistas vacías y las calles desérticas son algunos de los escenarios que deja la cuarentena total que causa estragos en la economía mundial, pero que, de manera inesperada, redujo los niveles de contaminación beneficiando así al planeta.
En las últimas semanas, reportes de distintos lugares del mundo reflejan cambios que pocas veces fueron vistos por la humanidad, y que se presentan principalmente en los países más afectados como China, Italia y España.
China, país en el que surgió el coronavirus, fue el primero en adoptar medidas drásticas de confinamiento y también fue el primero en mostrar cambias en la calidad del aire.
Durante el mes de febrero, la región de Hubei y sus cercanías mostró una drástica reducción de las emisiones de dióxido de nitrógeno en las ciudades, uno de los principales compuestos químicos causantes de la contaminación del medio ambiente.
Una situación similar se produjo con el avance del coronavirus en Italia. Producto de la cuarentena total hubo una mejora significativa de la calidad del aire. Así lo refleja los datos obtenidos por el satélite Sentinel 5P.
Pero la mejora de la calidad del aire no fue la única postal que pudo verse en el territorio italiano. En la ciudad de Venecia las aguas se convirtieron en cristalinas.
En las redes sociales circularon videos en los que se muestra a los canales de la ciudad "completamente limpios". Hasta se llegaron a formar bancos de pequeños peces que son imposibles de ver durante la actividad normal de la región. Esto se debe principalmente a que los sedimentos arrastrados por las embarcaciones caen hasta el fondo, reduciendo el agua turbia.
Por otra parte, España también reflejó una reducción de los niveles de contaminación atmosférica.
El Sistema de Vigilancia de Calidad del aire del Ayuntamiento de Madrid compartió datos que indican que el nivel del aire se ubica dentro de la categoría "muy bueno". En Barcelona, el nivel de concentraciones de dióxido de nitrógeno se redujeron a la mitad en los primeros días de aislamiento total.
Otra postal que deja la cuarentena total: la aparición de animales salvajes en las calles de las grandes ciudades.
Los ciudadanos de Barcelona pudieron captar a jabalíes recorriendo las calles vacías, los habitantes de la ciudad japonesa de Nara detectaron a ciervos paseando con total tranquilidad entre sus casas y, por último, los ciudadanos de Oakland en Estados Unidos visualizaron a pavos salvajes atravesando escuelas y otras instituciones que por lo general se encuentran atestadas de personas.
Luego de que la crisis del coronavirus termine, quedará observar si esto se convierte en un mensaje para el población mundial sobre la importancia de reducir la contaminación del planeta o si los niveles de contaminación se incrementarán en un intento por estabilizar la economía lo más rápido posible.
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