Portada  |  02 marzo 2019

Brasil: Lula da Silva salió de la cárcel para ir al funeral de su nieto Arthur

Esta es la segunda vez que expresidente, quien cumple una condena de más de 12 años, sale de la sede de la Policía Federal. El menor falleció a los siete años de una meningitis.

Internacionales

El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva salió este sábado de la cárcel de Curitiba (sur), donde cumple desde abril una pena de más de 12 años, para ir con custodia policial al funeral de su nieto en las afueras de Sao Paulo.

El exmandatario fue llevado en helicóptero desde la sede de la Policía Federal (PF) de Curitiba hasta el aeropuerto de la ciudad, donde abordó un avión del gobierno del estado de Paraná. El trayecto hasta Sao Paulo dura alrededor de una hora.

Lula, de 73 años, asistió a las exequias de su nieto Arthur, quien murió el viernes a los siete años de una meningitis. La ceremonia se realizó hacia el mediodía en el cementerio La Colina, en Sao Bernardo, en las afueras de Sao Paulo.

Vestido con un traje oscuro y camisa clara, un Lula con gesto muy serio saludó al medio millar de militantes que lo esperaban en la puerta. 

Esta es la segunda vez que Lula sale de la sede de la Policía Federal. La primera fue en noviembre, cuando fue llevado a prestar declaración ante el tribunal de primera instancia de Curitiba, en una causa por la que fue condenado el mes pasado a otros 12 años y 11 meses de cárcel.

Lula "está muy triste, dice que nunca esperó una noticia como esta, dijo que debería estar prohibido que un padre entierre a su hijo, que un abuelo entierre a su nieto", contó la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT), Gleisi Hoffmann, que lo visitó el viernes.

Arthur, cuyo padre es Sandro Luis Lula da Silva -uno de los cinco hijos de Lula-, había visitado en dos ocasiones a su abuelo en la cárcel.

En el cementerio lo esperaba un amplio grupo de familiares y allegados que velaban el cuerpo del niño desde la noche. También acudieron representantes de la izquierda brasileña y del Partido de los Trabajadores, como la expresidenta Dilma Rousseff o Fernando Haddad, candidato derrotado en las últimas elecciones.

A finales de enero, Lula no pudo asistir al entierro de su hermano Genival Inácio da Silva, conocido como Vavá, porque la Justicia le otorgó un permiso a última hora, cuando ya se estaba llevando a cabo el funeral. "No dejaron que me despidiese de Vavá por pura maldad", dijo Lula en esa ocasión.

Fotos / Fuente: AFP.

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