Por diversión, para "sobresalir", tenía todo en su casa pero quería más. Su primer robo fue a una fábrica junto a dos cómplices. Fue armado y con chaleco antibalas. Ese fue el puntapié de los siguientes robos.
Alan cuenta que se manejaban con “entregas”. Le avisaban de determinadas familias, casas y los asaltaban. Poco les importaba si adentro de la vivienda había gente o personal de seguridad. Dice no arrepentirse de los robos ni sentirse culpable.
Cometió dos homicidios en situación de robo, pero por respeto a su familia prefiere no dar detalles de los crímenes. Una entrevista de Mauro Szeta que nos deja sin palabras.
Está detenido, no siente culpa y tampoco se arrepiente … “Yo robé, maté y quiero dejar la cárcel para volver a hacerlo” pic.twitter.com/WUlWD1EiR0
— Telefe Noticias (@telefenoticias) 31 de mayo de 2018
Comentarios