Las petroleras tenían previsto aplicar una suba estimada entre el 2% y el 2,5% a partir de este jueves 1° de agosto; sin embargo, en las últimas horas se dio dio marcha atrás.
El incremento previsto tenía que ver con la aplicación del impuesto a los combustibles, que sube en función de la inflación del primer trimestre. Pero un decreto de última hora dispuso que la actualización será de 0,31 de centavos para la nafta y de 0,19 centavos para el diésel. Por lo tanto, las petroleras no lo trasladarían a precio final.
LA NAFTA NO AUMENTARIA @buentelefe decreto 531/2019 el Gobierno dispuso reducir el monto de actualización del impuesto a los combustibles. La actualización será de 0,31 de centavos para la nafta y de 0,19 centavos para el diésel. Las petroleras no lo trasladarían a precio final pic.twitter.com/xj10Q21b9K
— Adrian Puente (@puenteadrian) August 1, 2019
En julio, el Gobierno Nacional decidió desdoblar el impuesto -era un 5% en total- para moderar el impacto en los bolsillos. En ese momento, las petroleras aumentaron un 2,5% los valores de las naftas y un 1,75% el precio del gasoil. Entonces, con los primeros días de agosto se iba a aplicar el porcentaje restante.
Pero el menor aumento del impuesto sería absorbido por las propias petroleras, aunque aún no confirmaron qué harán.
Las petroleras, sin embargo, intentarán recomponer las tarifas ya que las compañías consideran que los precios están atrasados un 10% en relación a la variación del tipo de cambio y el precio internacional del petróleo en lo que va del año.
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