"La DAIA repudia el ataque. El acto de vandalismo fue causado por desconocidos que treparon los muros y destruyeron mármoles, placas, objetos de bronce y otros objetos que se encontraban empotrados", señaló la organización en un comunicado de prensa, informa la agencia AFP.
Ariel Braverman, dirigente de la agrupación política Libres del Sur, declaró a la prensa local que "fue como en 2009 cuando profanaron las tumbas de mis bisabuelos Marcos Braverman y María Blejer junto a 7 lápidas más en el cementerio de San Luis", capital de la provincia homónima, ubicada 900 km al noroeste de Buenos Aires.
"Horrible acto de neonazismo, intolerancia y odio por parte de los sectores del oscurantismo medieval de San Luis que ya muchos conocemos", dijo Braverman.
San Luis es un distrito de casi 500.000 habitantes, con una economía de base agrícola, pero con fuertes inversiones en industria y riquezas turísticas.
La colectividad judía de Argentina está integrada por unos 190.000 miembros y es una de las mayores de Latinoamérica.
En el último informe anual de la DAIA, difundido en setiembre de 2018, se reportó que "los hechos de antisemitismo crecieron en el país en un 14% en el último año y su mayor presencia se dio en las redes sociales".
Durante las últimas semanas París ha sido blanco de múltiples pintadas con mensajes antisemitas e incluso una cruz esvástica apareció sobre un retrato de Simone Veil, exministra francesa y superviviente del Holocausto.
Hace una semana, millares de personas se congregaron en toda Francia para denunciar un aumento del antisemitismo en el país, unas horas después de que unas 80 tumbas fueran profanadas en un cementerio judío.
En Argentina hubo dos grandes atentados en la década de 1990, uno en la embajada de Israel y otro en el centro AMIA, con decenas de muertos y heridos. Sin embargo, desde entonces sólo se producen en forma aislada acciones antisemitas.
Foto: Gentileza El Chorrillero
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