Por Gabriela Cerioli
El 9 de agosto se conmemora en Argentina el "Día Nacional de la Educación Especial", jornada dedicada a los profesores que atienden a estudiantes con discapacidad. La elección de la fecha deriva del aniversario de la creación de la Dirección de Educación Especial, que tuvo lugar el 9 de agosto de 1949.
La Educación Especial es la modalidad del sistema educativo destinada a asegurar el derecho a la educación de las personas con discapacidades, temporales o permanentes, en todos los niveles y modalidades del Sistema.
La modalidad de Educación Especial, establecida en la Ley de Educación Nacional N° 26206, propone asegurar el derecho a la educación en todos los niveles y modalidades a las personas con discapacidad, al garantizarles un conjunto de servicios en escuelas especiales y comunes, desde la primera infancia hasta la adultez.
Dicha ley, aprobada el 14 de diciembre de 2006, garantiza una educación inclusiva asegurando condiciones de igualdad y valoración de las diferencias como también el desarrollo de una propuesta pedagógica que les permita a las personas con discapacidades el máximo desarrollo de sus posibilidades.
El acceso a una educación inicial, primaria, secundaria y superior inclusiva y de calidad es un derecho y un desafío para el sistema escolar, que debe responder a las necesidades de todos sus estudiantes.
Una vez escolarizados los niños con discapacidad necesitan algún tipo de integración dentro del aula para poder emprender su proceso aprendizaje de la mejor manera posible y en igualdad de condiciones que el resto de sus compañeros.
En diciembre de 2017 la provincia de Buenos Aires estableció, mediante la Resolución 1664/17 “Educación Inclusiva de niñas, niños, adolescentes, jóvenes y jóvenes-adultos con discapacidad en la provincia de Buenos Aires”, un nuevo marco legal para la incorporación de estos estudiantes a cualquier institución educativa.
Desde el Ministerio de Educación bonaerense, afirman que “esta norma fortalece, sostiene y promueve la construcción de prácticas inclusivas en todas las escuelas, propiciando la elaboración de las estrategias didácticas y los apoyos necesarios para que el servicio educativo sea de calidad y para que el aprendizaje de las personas con discapacidad sea real y efectivo”.
El jardín de infantes comunitario "Virgen del Cerro", de Lomas de Zamora, es una de las instituciones que trabajan con la inclusión, tal como muestra el video que desde la coordinación del jardín hicieron llegar a Telefe Noticias.
Del total de alumnos con discapacidad matriculados en la Provincia, el 55 por ciento se encuentra realizando su trayectoria con propuesta de inclusión en escuelas de nivel, mientras que el 45 por ciento asiste a escuelas de la modalidad de Educación Especial.
“Este año se produjo un aumento del 11 por ciento de alumnos con discapacidad en escuelas de nivel”, señalan en la cartera educativa provincial. Es decir, hay más estudiantes con discapacidad que transitan una trayectoria educativa integrada con las propuestas curriculares de la educación común.
Sin embargo, este dato tiene su contracara. Los gremios docentes opositores cuestionan que mientras aumenta la matrícula de estudiantes con discapacidad en escuelas comunes, se reducen los recursos en el ámbito de la Educación Especial.
"No perdemos de vista los recortes que el Gobierno hace en los programas de Educación Especial bajo el argumento de la inclusión", observan desde el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA).
La normativa propone trabajar con la diversidad de cada estudiante en el momento de aprender, más allá de la discapacidad, e impulsa que los docentes hagan las adecuaciones necesarias para que cada niño/a pueda aprender a su ritmo. "No todos los chicos con discapacidad necesariamente van a tener un acompañamiento de la Educación Especial", interpreta Mariel Mena, maestra de estudiantes sordos e hipoacúsicos de la Escuela de Educación Especial N°506 de Tigre, consultada hace 20 días por el diario Página 12. Antes del receso invernal, en el establecimiento donde trabaja se pretendió reducir el plantel docente. Luego de importantes movilizaciones de la comunidad educativa, la medida se suspendió provisoriamente, por lo menos hasta el año que viene.
La salud, un derecho diezmado
En cuanto a la salud, las estadísticas sobre la situación de los niños con discapacidad son alarmantes, y son las que explican en última instancia la precaria situación de los adultos con discapacidad.
Lo cierto es que, según el último censo nacional (2010) existen 570.000 niños con discapacidad en el país, de los cuales una ínfima minoría de apenas el 7 por ciento tiene cobertura de salud. Es decir, casi la absoluta mayoría de esos niños están totalmente abandonados a su suerte. No cuentan con un plan integral de salud que les permita gozar de una calidad de vida acorde a sus necesidades.
Y es sabido que un niño con discapacidad sin el tratamiento adecuado está condenado a vivir de adulto una vida totalmente dependiente. Es decir, a no poder vivir solo, a no poder trabajar, a no poder estudiar, entre otras cosas.
Foto: captura de video
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