El caso se produjo este jueves en la Unidad 31 del Servicio Penitenciario Bonaerense cuando el personal requisó la mercadería que una mujer oriunda de Escobar le llevó a su hijo alojado en el pabellón 3.
Cuando los agentes revisaron una bandeja con ensaladas encontraron un celular, uno de los elementos que se prohíbe ingresar a los penales.
Como consecuencia del incidente, las autoridades de la cárcel dispusieron como sanción la suspensión de la visita de la mujer a su hijo por dos semanas.
El interno al que iba dirigido el teléfono móvil, de 29 años, se encuentra condenado a siete años de prisión por el delito de robo calificado.
Cabe destacar que en lo que va del año los agentes penitenciarios pudieron incautar 19.700 celulares en las 57 cárceles de la provincia de Buenos Aires. De acuerdo al mismo informe, en la Unidad 31 se evitó el ingreso de 880 teléfonos móviles.
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