A tan sólo un mes y medio del verano comienzan los preparativos para las vacaciones y, como todos los años, los conductores deben renovar la Verificación Técnica Vehicular (VTV) para salir tranquilos y evitar multas.
Este procedimiento, en el que se revisa el estado mecánico y la emisión de gases de los vehículos, es necesario para poder circular en el territorio argentino y por eso es importante conocer cómo sacar el turno para realizarlo.
Antes de realizar la inspección, se debe reservar un turno mediante la página web oficial del Gobierno de la Ciudad en la sección VTV o a través de la línea telefónica 147.
En el momento se podrá seleccionar una planta verificadora por zona, fecha y hora disponible en los siete sitios habilitados.
Para concretar el turno, se deberá abonar previamente el costo total del trámite. Los medios de pago son: tarjetas de crédito, MercadoPago, Pagofácil o Rapipago. El costo es de $1362 para autos y $512 para motos.
Una vez que figure "Pagado" el usuario recibirá un mail con los detalles del turno. En caso de que se necesite suspenderlo, el pago servirá para el próximo trámite.
En la fecha seleccionada, el dueño del vehículo se debe presentar en la planta con el DNI, la licencia de conducir vigente, seguro al día y la constancia de pago correspondiente a la reserva de turno. En el caso de que concurra al establecimiento un tercero, debe contar además con la cédula verde y la azul.
Durante el proceso se le revisará la emisión de gases y de ruidos, el sistema de dirección y tren delantero, el sistema de frenos, el sistema de suspensión, el chasis, los neumáticos y llantas, luces, la seguridad y emergencia y por último la documentación del vehículo.
En caso de no haber aprobado la VTV, el conductor dispondrá de un plazo de 60 días hábiles para realizar las mejoras correspondientes y concurrir con un turno previo pero sin ningún costo.
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