La bloguera Melania Capitán apareció muerta en una granja de Huesca (España), confirmó la Guardia Civil de Aragón.
La principal hipótesis que manejan los investigadores apunta a que la joven de 27 años se quitó la vida, según la revista Jara y Sedal en la que colaboraba la cazadora.
Dicho medio da cuenta de un presunto mensaje que la bloquera dejó a su familia: "Tomó este fatal camino por temas de índole personal".
Aunque Capitán denunció en varias ocasiones el acoso de parte de grupos defensores de animales, la investigación avanza hacia la versión del suicidio, sobre todo a partir de los testimonios de algunos amigos a los que habría llamado para despedirse horas antes de su muerte.
Caza, fama y persecución
Melania, natural de Badalona, residía hace tres años en Huesca. Tenía más de 32.000 seguidores en Facebook y 6.500 en Instagram, donde publicaba con frecuencia fotos de su "hobby".
A raíz de ello, comenzó a recibir duras críticas de parte de grupos animalistas. Precisamente, en mayo, Capitán difundió en el periódico Heraldo algunos de los mensajes de acoso: "Te vamos a callar con una bala en la frente", "espero que alguien te dé una paliza que te deje cuatro meses en coma" y "somos muchos los que deseamos que no vivas", eran algunos de ellos.
Según contó la joven, esa persecución hacía que su vida fuera "insostenible".
"Hace dos semanas publicaron la ubicación de mi trabajo y pidieron que fuese despedida; a los pocos días, tres personas de una plataforma animalista se presentaron allí para hablar con mis jefes y seguir presionando", contó.
En esa ocasión agradeció el apoyo de parte de la empresa en la que se desempeñaba y aprovechó para advertirle a los críticos: "Los cazadores somos muchos y no nos van a callar".
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