En la Argentina hay 47.000 buscados o evadidos. Un equipo de Telefe Noticias siguió de cerca una investigación de tres meses que terminó con la captura de un prófugo.
Por primera vez en la televisión te mostramos el operativo completo que llevó a la detención de "El Tano", quien había sido detenido por robo a mano armada y en la fuga mató a una persona.
¿Cómo fue la búsqueda, persecución y captura? La investigación duró 90 días y seguimos el paso a paso del operativo de búsqueda, persecución y captura.
La cacería: así se busca (y atrapa) a un prófugo en la Argentina. Apuntes detrás de escena…
En el auto donde estamos escondidos se respira tensión. Hay silencio. Y miradas para todos lados, con sigilo, con firmeza, con expectativa. Cada tanto tiro algún comentario genérico al aire, como para querer aflojar lo inaflojable, pero no: los efectivos de las fuerzas de seguridad que acompañan al equipo de Telefe Noticias que está agazapado en este automóvil sólo piensan en que aparezca, por fin, “El Tano”. Ese es el apodo de uno de los 47.004 prófugos que hay en Argentina (sí, ¡tantos como para llenar un estadio!) al que están buscando hace meses por robo a mano armada primero, evasión de un penal después y homicidio como para rematar su peligroso prontuario.
La búsqueda del Comando Unificado de Recaptura de Evadidos (CUFRE) del Ministerio de Seguridad de la Nación empezó hace meses. Y por primera vez permitieron que un equipo de televisión los acompañara en cada detalle del operativo: desde el momento en que llega un fax con la orden de captura, pasando por el momento en que un equipo especial analiza posibles vínculos sospechosos y escuchas telefónicas o por la extraña situación en la que una agente de inteligencia trata de “seducir” (literalmente) al “Tano” para forzar un falso encuentro amoroso que le haga pisar el palito.
Cuando abrimos la puerta del auto, el corazón late a mil kilómetros por hora. Unos segundos antes, lo vimos: vestido tal cual indicaron las fuentes que los efectivos lograron contactar en las últimas horas. “El Tano” escucha el grito de “¡alto!”. Y sabe que perdió. ¿La buena noticia? Ahora hay un prófugo menos en nuestro país. ¿La mala? Todavía quedan 47.003 que se siguen escapando de la Ley. Esta historia, sin lugar a dudas, continuará…
Texto de Nacho Girón | @nachogiron
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