La multinacional de telecomunicaciones Telefónica, con sede en España, anunció sorpresivamente este miércoles que se reagruparon las operaciones de hispanoamérica en una sola unidad de negocio con el fin de generar mayor valor y relevancia a la región.
Sin embargo, esto no significa que la empresa ponga en venta Telefónica Argentina ni el resto de sus filiales.
"La historia de nuestra compañía no se entiende sin la apuesta desde hace 30 años por Latinoamérica, que ha hecho de Telefónica una compañía mejor. Siempre hemos mostrado un fuerte compromiso por la región, incluso en sus momentos más difíciles", dijo José María Álvarez-Pallete, CEO de la compañía que es dueña de Movistar.
"Nuestras operaciones en Latinoamérica eran hasta hace unos años el motor de crecimiento de la compañía. Sin embargo, las condiciones particulares en estos mercados han impactado en la evolución de los negocios, mermando su contribución en los últimos años por distintos motivos y a pesar de los enormes esfuerzos de los equipos locales, que siempre han mostrado un fuerte compromiso", justificó Álvarez-Pallete en un comunicado.
La nueva división estará bajo un equipo directivo diferenciado al resto de la multinacional, que ahora centrará sus negocios en España, Reino Unido, Brasil y Alemania.
El objetivo fundamental de este "spin-off operativo", dijeron, es "la atracción de inversores y la obtención de potenciales sinergias con otros agentes de los mercados".
El anuncio se enmarca en una revisión estratégica de los negocios de Telefónica en Hispanoamérica que apunta a proteger a la empresa frente "a la volatilidad económica y cambiaria inherente" a la región.
"Siempre hemos mostrado un fuerte compromiso con la región, incluso en sus momentos más difíciles. Es, además, una región con la que personalmente tengo una relación especial, en la que he pasado la mayor parte de mi carrera en Telefónica", dijo Álvarez-Pallete en una carta abierta al mercado.
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