Un chico español de 13 años prendió el celular después de un castigo de tres días y se encontró con una catarata de mensajes de WhatsApp. No fueron mil, ni dos mil, ni tampoco tres: en total recibió 14.000 mensajes.
"No es problemático, se relaciona bien, saca notables y sobresalientes. Nunca vimos nada preocupante"
Según publica el diario La Nueva España, al adolescente le llegaron en promedio 4.600 mensajes por día, ya que forma parte de 110 grupos diferentes. Según la mamá del chico, gran parte de los envíos eran saludos que respondían los integrantes de cada grupo con motivo de las fiestas de su barrio, en Asturias, Oviedo.
"Con los teléfonos estamos inmersos en una locura de la que muchas veces no nos damos cuenta"
"Mi hijo estaba sorprendido, pero lo tomó a risa. Yo reafirmé lo que ya pensaba durante mucho tiempo: que con los teléfonos estamos inmersos en una locura de la que muchas veces no nos damos cuenta", consideró la mujer y aseguró que junto al padre del chico procuran "estar atentos al tipo de información que intercambia".
Foto: Getty Images.
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