Cassie Clayshulte, una joven fotógrafa estadounidense, nunca pensó que encontraría una curiosa coincidencia; un niño y una niña, que nacieron en habitaciones contiguas y el mismo día, fueron llamados Romeo y Julieta, al igual que una de las parejas más famosas de la literatura.
Cassie, quien se especializa en imágenes de recién nacidos, fue contratada por los padres de Romeo para evidenciar sus primeras 48 horas de vida en el Hospital Coastal Carolina. Cuando fue a visitarlo a la sala de bebés, notó que su compañera se llamaba Julieta. Fue ahí cuando tuvo la idea de fotografiarlos juntos.
Según explica Cassie en su cuenta de Facebook, los padres de Romeo y Julieta habían escogido sus nombres durante el embarazo, mucho antes de su nacimiento, por lo que el romántico hecho se trató de una casualidad.
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