Aunque el fin del mundo fue el 21 de junio pasado según la última corrección del calendario maya, el pastor evangélico Paul Begley explicó en su canal de YouTube que en realidad se producirá el 21 de diciembre de este año.
Si bien la predicción maya ponía esa fecha en 2012, hace poco otros adeptos a las hipótesis fatales explicaron que había un error al partir del cambio del calendario juliano por el gregoriano en 1582, cuando se perdieron 11 días del año para poder reflejar mejor el tiempo que tarda la Tierra en orbitar el Sol.
En principio, en el cálculo se sumaron esos 11 días a lo largo de 286 años y dio el 2012 como fecha del apocalipsis.
El científico Paolo Tagaloguin explicó en forma reciente que "el número de días perdidos en un año debido al cambio en el calendario equivale a ocho años", así que la fecha pasó para 2020, pero a junio.
"El fin del mundo va a ser el 21 de diciembre de este año, cuando Júpiter y Saturno estén a solo 0,1 grados entre sí, se va a formar una estrella muy brillante. Esta fecha coincide con el solsticio de invierno en el hemisferio norte", aseguró ahora Begley que volvió a diciembre con la fecha final.
"Así que esto es muy raro y será en el solsticio de invierno. Será el 21 de diciembre de 2020. Los mayas ahora se están reorganizando y dicen que este podría ser el fin del mundo tal como lo conocemos", insistió.
Según el predicador, hay tres signos proféticos principales en los cielos este año. El primero es el clipse del anillo de fuego y el solsticio de verano pasado en el hemisferio norte.
El segundo signo profético es un eclipse lunar el 4 de julio, que el predicador de la marca de fuego cree que pondrá roja la sangre de la Luna.
Con respecto al tercer signo profético, dijo: "Entonces, por supuesto, en mi cumpleaños el próximo 21 de diciembre, será el solsticio de invierno, la gran conjunción cuando Júpiter y Saturno se unen".
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