Se presume que la pistola pertenece al padre de la niña, quien es policía de Rosario y fue pasado a disponibilidad por el hecho, informan los colegas del diario La Capital de Rosario.
Al parecer, fue la niña de 7 años la que descubrió el arma mientras sacaba sus útiles escolares y posteriormente le avisó a la maestra, lo cual generó la inmediata intervención policial.
Al lugar al salón, los efectivos de la División Informaciones y de la Comisaría 5ª incautaron una pistola calibre 9 milímetros marca Bersa Thunder Pro cargada con 11 balas.
La investigación detectó que la pistola pertenece a un agente policial que se desempeña en el área narcocrimimal de la Policía de Investigaciones (PDI) de Rosario.
Según trascendió, el efectivo en cuestión aseguró ante la policía que había dejado el arma de manera provisoria en la mochila de la niña cuando pasó a buscar a un familiar y que luego olvidó retirarla.
El secretario de Coordinación de Gabinete y Articulación con el Poder Judicial del Ministerio de Seguridad, Pablo Cococcioni, confirmó que se le inició administrativo al policía que tenía a su cargo el arma reglamentaria que la niña llevó a la escuela.
Cococcioni precisó que lo ocurrido "no configura un delito penal" pero advirtió que "en la órbita administrativa se considera que esto es una grave falta a la seguridad, por lo que se procedió a la suspensión preventiva y pase a disponibilidad del efectivo policial, y se ha iniciado el sumario pertinente a los efectos de esclarecer el hecho y aplicar las sanciones correspondientes". Además, confirmó que el arma estaba cargada.
Foto: archivo web
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