La fuga de Brian Exequiel Díaz Crespin suma una nueva polémica a un ya escandaloso caso de irregularidades en las fuerzas de seguridad.
El joven de 23 años cumplía una sentencia por robo agravado en el penal de Boulogne Sur Mer, en Mendoza. Hacía tres años y medio que estaba preso, con sentencia hasta marzo de 2020, pero ya había comenzado los trámites para solicitar libertad condicional.
Durante la madrugada del viernes logró escaparse con tres pistolas 9 milímetros de los agentes del servicio penitenciario, que supuestamente "se quedaron dormidos" y que son investigados por el hecho.
Cuando notaron el faltante del preso, dieron el alerta y comenzaron tareas de rastrillaje para dar con su paradero.
Horas más tarde, intentó cometer un asalto en Maipú (Gran Mendoza), fue perseguido y recapturado.
En la mañana del sábado, al ser trasladado otra vez a la prisión, uno de los policías decidió sacarse una selfie con el detenido en el patrullero.
La imagen muestra al agente y a Díaz Crespín sonriendo en el asiento trasero del móvil.
"Vamos a averiguar si el superior del efectivo de la Unidad Operativa de Maipú dispuso de alguna sanción, lo puede suspender hasta 20 días. Si esto no ha ocurrido, vamos a iniciar un sumario", confirmó a Los Andes Marcelo Puertas, titular de la Inspección General de Seguridad.
El funcionario añadió: ·Es una falta evidente, de mediana gravedad, pero es una falta, y no podemos permitir este comportamiento dentro de la Fuerza".
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