Hace un mes la noticia causó un gran impacto. Se reveló un brutal maltrato animal: más de 400 caballos y yeguas fueron rescatados en un predio de Tristán Suárez, en Ezeiza, al Sur del GBA.
Los animales estaban desnutridos, lastimados, algunos agonizando y una gran parte, se sospecha, robados.
Ahora, sigue la lucha por recuperar a los caballos del ya rebautizado por los vecinos como “campo de la muerte”.
Para los rescatistas no hay dudas: los animales eran usados para la faena y la exportación de la carne, para ser consumida.
El CRRE junto a la ONG Caballos de Quilmes fueron nombrados el miércoles particulares damnificados en la causa. “Esto es una enorme responsabilidad y trabajo por parte de todos los voluntarios, porque debemos hacemos cargo de presenciar cada pericia y auxiliar a impulsar día a día la investigación”, explican desde la entidad. Para ayudar, loe vecinos pueden entrar al Facebook de la CRRE.
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