"Me fui de acá porque criarlos acá es imposible, es como tener chicos enjaulados. No tienen libertad de salir a jugar un deporte, de ir al cine. Acá no tenés derecho a nada", contó Nélida, la mamá del chofer asesinado Leandro Alcaráz, que decidió irse a vivir a Corrientes con sus hijos más chicos por la inseguridad de la provincia de Buenos Aires.
"Hablé el día anterior con él, ese día no me llamó. Pensé que a la noche me iba a llamar. Todos los días me llamaba o me mandaba un mensajito, ese día no llegó", conto la mujer sobre su último contacto con su hijo, que murió asesinado el último domingo por la tarde cuando hacía horas extras en el interno 103 de la línea 620, en Virrey del Pino.
Emocionada, la mujer recordó a su hijo y su pasión por su trabajo: "Llevaba 3 años como chofer, le encantaba lo que hacía. El aprendió a manejar a los 9 años". Carlos, uno de los hermanos de Leandro, también agradeció y envió un mensaje a los colectiveros: "Todos los choferes se solidarizaron con nosotros. Estamos apoyándolos, porque ellos están en el día a día arriba del colectivo.
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