"Estela, uno de los muchachitos de los que usted hablaba es René Houseman. ¿No sé si alguna vez han tenido la posibilidad de hablar o de cruzarse en algún lugar?", preguntó Rodolfo Barili ante los micrófonos de Telefe Noticias a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto mientras René Houseman, campeón Mundial de Argentina 78 escuchaba atentamente. Ninguno de los dos se conocía personalmente, ni habían hablado en toda su vida, a pesar de haber sido protagonistas centrales de lo que ocurrió en el país durante la última dictadura militar. El cruce fue en 2008, a 30 años del primer título Mundial de la Selección Argentina.
"No nos hemos cruzado, no nos hemos conocido, pero está la oportunidad 30 años después. Que nos miremos las caras, compartamos los dolores y sobre todo que es lo que tenemos que pensar. Que tenemos que juntarnos para la reconstrucción de nuestro país", aseguró Carlotto sobre Houseman, el campeón argentino que falleció hoy a los 64 años.
#PerlaDeArchivo Junio 2008: Estela de Carlotto, el “Loco” Houseman y la dictadura #LoVisteEnTLFNoticias @Rtripoliok pic.twitter.com/k5J9s0TYxb
— Telefe Noticias (@telefenoticias) 22 de marzo de 2018
Mientras la Selección Argentina ganaba la Copa del Mundo, a escasas cuadras del Monumental, torturaban a Laura, la hija de Estela, y nacía su nieto Guido en la ESMA. Muchas fueron las veces que Houseman y parte del equipo argentino que ganó el Mundial 78 tuvo que despegarse de la dictura de Jorge Rafael Videla: "En ningún momento supe lo que sucedía en el país como el resto de mis compañeros. La matanza, todos los desaparecidos que había en ese momento. Soy muy consciente de lo que hablo, lo que digo y también yo no fui ningún forro de Videla, ni de nadie. No jugué para que justifiquen a los desaparecidos, yo jugué para Argentina, jugué para defender a mi país en ese momento", relató Houseman.
"Está bueno, Estela, 30 años después permite hacer esta lectura diferenciada que los argentinos durante mucho tiempo no pudimos hacer", reflexionó Barili, y Estela respondió de forma contundente sobre las palabras del campeón del mundo: "Todo lo que sea la memoria, poner las cosas en su lugar. El no tener un revanchismo, una cacería de brujas que no corresponde porque nosotros no somos quien para juzgar a esos muchachitos. Si estuviera mi esposo lo admiraría porque lo admiraba entonces también", aseguró Carlotto, y agregó: "Yo creo que cuanto más claro hablemos, cuanto más nos miremos a los ojos... los que no quieren la verdad absoluta porque no les conviene se van a sentir mal. Y nosotros queremos sentirnos bien".
"Gracias a ustedes por poner en imágenes todo esto tan valioso para la Sociedad argentina. Es una manera de poner la historia en su punto justo", concluyó Carlotto para cerrar un cruce histórico.
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