Una adolescente de 15 años había salido a la puerta de su casa del barrio porteño de Flores para sacar la basura. Un grupo de obreros tercerizados del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires empezó a silbarle y gritarle. Su papá, que vio todo por la ventana, salió a defenderla, pero todo se descontroló y terminaron en la comisaría.
Cuando el hombre recibió la primera trompada devolvió el golpe con una maza que alcanzó a arrebatarles, que impactó de lleno en la cabeza de uno de los obreros. Los demás lo golpearon pero en un momento logró escapar y volver a su casa en busca de refugio.
Los operarios lo persiguieron e intentaron abrir a patadas la puerta de la vivienda. "Explotó el vidrio de la ventana", contó la madre de la joven, que hoy la acompañó al colegio.
Un vecino que había advertido lo que pasaba se comunicó con la policía y minutos después llegaron dos patrulleros.
Tanto el padre de la adolescente como los cinco obreros involucrados en la pelea fueron demorados.
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